La Dieta Keto o Cetogénica ha ganado popularidad en los últimos tiempos, pero su raíz se remonta a los orígenes mismos de la humanidad. En este artículo, exploraremos los fundamentos de esta alimentación que busca llevarnos de vuelta al estado cetogénico, un estado natural en el que nacemos y que fue el predominante durante millones de años.
Estado cetogénico: la cetosis como estado natural
Cuando la glucosa en sangre escasea, el hígado produce cetonas a partir de la grasa consumida o de nuestras reservas propias. Este estado, conocido como cetosis, es el estado natural del ser humano. De hecho, nacemos en cetosis, pero a lo largo del tiempo, hemos perdido esta capacidad debido a la introducción de carbohidratos refinados en nuestra dieta diaria.
Cetoadaptación y pérdida de nuestra condición natural
Durante millones de años, nuestros genes se han adaptado a utilizar cetonas como principal fuente de energía, generando menos estrés oxidativo en comparación con el uso de glucosa. La cetoadaptación se ha vuelto esencial, ya que hemos perdido la eficiencia en el uso de nuestro estado natural, llevándonos a niveles constantemente altos de azúcar en sangre e incapacidad para producir cetonas.
El impacto en nuestra salud: menos glucosa, menos estrés oxidativo
Tribus que aún viven de manera silvestre, como los inuit, hadza y massai, mantienen niveles de glucosa en sangre entre 40-60mg/dL. En contraste, la mayoría de nosotros lucha con niveles más altos debido a una dieta rica en carbohidratos refinados, contribuyendo a un estado prooxidativo y pro-carcinogénico. Este contraste en niveles de glucosa y su impacto en nuestra salud subraya la importancia de la alimentación en nuestra fisiología. Descubre cómo nuestra aproximación a la Psiconeuroinmunología puede ayudarte a mejorar tu bienestar, ajustando tu dieta y estilo de vida.
Cetonas y combate al cáncer: un enfoque prometedor
El uso de cetonas como sustrato energético presenta beneficios notables, especialmente en el combate contra el cáncer. Las células cancerosas tienen dificultades para sobrevivir en un estado cetogénico, ya que dependen principalmente de la glucosa. Niveles más bajos de glucosa pueden ser clave en la prevención y tratamiento de enfermedades.
Desafíos y recompensas de la cetoadaptación
Cambiar hacia una dieta cetogénica implica dejar de lado la dependencia de los carbohidratos y reducir la frecuencia de las comidas. La transición puede generar síntomas de déficit de energía, pero una vez cetoadaptados, experimentaremos un aumento significativo en la energía, incluso durante el ayuno.
El futuro de la dieta cetogénica: más allá de la moda
Aunque la dieta cetogénica parece ser una tendencia actual, sus beneficios para la salud fueron reconocidos ya en 1920. Este enfoque alimenticio, que fue la norma durante 3.5 millones de años de evolución humana, ofrece una oportunidad para restaurar nuestro estado natural y disfrutar de una vida más saludable y enérgica. ¡Volvamos a nuestras raíces cetogénicas para un bienestar duradero!